Formas
y tipos de investigación
La
investigación se divide en dos formas principales: básica
y aplicada. La
investigación básica se desarrolla en un marco
teórico y su propósito esencial
es generar nuevos conocimientos mediante el descubrimiento de
principios y
generalizaciones amplias. Utiliza procedimientos rigurosos de muestreo
para que
sus resultados puedan extenderse más allá del grupo o
situación estudiada.
Además, no se preocupa por la aplicación inmediata de sus
hallazgos, ya que
esto corresponde a otros especialistas.
Por otro lado,
la investigación aplicada —también llamada
activa— está estrechamente
relacionada con la investigación básica, pues depende de
sus aportes y
descubrimientos teóricos. Su objetivo es llevar la teoría
a la práctica y
confrontarla con la realidad.
Los tipos de
investigación permiten clasificar
el trabajo científico según el propósito que
persigue. Existen investigaciones
que exploran un tema para conocerlo mejor, otras que describen
características
y situaciones, y otras que buscan explicar causas y relaciones.
Comprender los
tipos de investigación es fundamental, porque orientan el nivel
de profundidad
del estudio y el camino metodológico que seguirá el
investigador para obtener
conocimiento nuevo y confiable.
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